Hace unos meses algunos vecinos solicitaron que compartamos algo sobre la llamativa particularidad de la arquitectura del Templo Parroquial "Sagrado Corazón de Jesús" en Choele Choel. Con la cuarentena no puedo alegar "falta de tiempo". Lo real es que mucho no se y lo que data en los registros/archivos parroquiales es escaso. La gran riqueza está en la vivencia de quienes hayan participado de ese proceso y en el recuerdo de quienes hayan resguardado testimonios/fotos.Si bien para algunos solo se trata de la construcción de un espacio físico es inobjetable que el sentido y singularidad del mismo lo hace especial.
Lo que felizmente se preserva en los archivos parroquiales son algunas misivas (con fechas de abril de 1964) elaboradas por el arquitecto Juan Manuel Llauro que desde su estudio en Buenos Aires contesta requerimientos al sacerdote Guido Luchelli quien junto a comisiones locales cogestionaban esta obra cultual y otras obras vinculadas a lo educativo.
Una generosidad que subrayo de dicha carta ,cuyo escaneo a continuación publico , es el párrafo en el que J.M. Llauro expresa : "Con referencia a nuestros honorarios quería aclararle Padre que no cobraremos cosa alguna en lo referente a la Iglesia y parroquia (dependencias anexas). Únicamente les solicitamos que sean ejecutados de acuerdo a los planos y nuestras instrucciones a efecto de que la obra tenga la unidad indispensable. Al respecto estamos enteramente a sus ordenes para lograr un edificio coherente y que realmente les sirva"
Se conservan en buen estado los planos con el sello LLAURO URGEL que guiaron la obra (baptisterio ,
presbiterios, planta de bases, viguetas, campanarios , cabreadas etc.). El
edificio no se consumó en su totalidad. Hay partes
proyectadas como el campanario que no se construyo de acuerdo al plano original
por razones económicas , solo se hicieron las bases del mismo que están detrás
de la sacristía. El campanario actual (la "H") es la ejecución de un plan B.
Los planos, casi la totalidad , tienen el sello LLAURO
URGEL y la firma del INGENIERO BIGNOLI.
Algo interesante sobre esta construcción se encuentra en el libro digitalizado y publicado por el estudio de arquitectos URGELL-PENEDO-URGELL en 2016 con motivo de los 60 años de trayectoria. En las paginas 53 , 54 y 55 comparten algunos detalles ligados a los distintos vectores que inspiraron la fisonomía del Templo. (https://issuu.com/estudiourgellpenedourgell/docs/upu_issuu_baja)
Comparto alguna de esas imágenes :
"Resuelve en su cumbrera el ingreso de luz cenital que genera un clima etéreo en su interior"
Bella dinamicidad de interacción luz - penumbra ... ....
Arq. Juan Manuel Llauró
Formado en la década del cincuenta, en una facultad que se alejaba del academicismo e incorporaba las ideas del movimiento moderno. Crean el estudio importante fundado por Juan Manuel Llauró y José Antonio Urgell como Llauró-Urgell, con la sumatoria de Enrique Fazio en 1976 pasó a llamarse Llauró-Urgell-Fazio .Entre sus principales obras se encuentran, Terminal de Ómnibus de Luján, Central Termoeléctrica Alto Valle, en Cipoletti ,Río Negro, Villa El Chocón, Hospital San Vicente de Paul, Villa Permanente de Yacyretá, Centro Universitario de la Universidad de San Luis,Archivo y Museo Históricos del Banco de la Provincia de Buenos Aires "Dr. Arturo Jauretche"entre muchas otras.
El Estudio Urgell-Penedo-Urgell
fundado en 1956, cuenta con una trayectoria de mas de 60 años en el desarrollo de
proyectos de Arquitectura y Urbanismo.
Formado en la década del
cincuenta, en una facultad que se alejaba del academicismo e incorporaba las
ideas del movimiento moderno, Jaqui Llauró ya tiene más de cuarenta años de
ejercicio profesional y recibe en estos días un justo reconocimiento a su trayectoria
en el ámbito de FADU. Curada por la arquitecta Sandra Méndez Mosquera, de ARCA,
la exposición muestra un compendio de obras que van desde los inicios de su
carrera en la década del sesenta hasta los trabajos más recientes de estos
últimos años. Son exhibidos material gráfico y maquetas, desplegando más de
veinte trabajos que acercan la obra de Llauró a los alumnos de la facultad.
Jaqui ha dedicado gran parte de su tiempo a la docencia y en su cátedra se reúnen hoy tres generaciones de arquitectos.
¿Cómo eran los años de facultad en la calle Perú? ¿Quiénes eran los referentes para los alumnos en esa época? Rápidamente, Jaqui trae a la memoria las dos cátedras que por aquel entonces habían incorporado las ideas del movimiento moderno, las de Casares y Leiva. Era con esos profesores con quienes todos querían cursar. Fuera de la facultad, las figuras de Amancio Willams, “dueño de un purismo y de ideas arquetípicas” y de Eduardo Sacriste, “un ejemplo de sensatez y capaz de lograr una lógica amalgama entre lo utópico y lo fáctico”, eran estudiados y valorados.
El recuerdo de los años de formación lo llevan a invocar el nombre de Pierre de Monteró, un foro de discusión de ideas y un punto de encuentro para el trabajo en común que congregó a un grupo de estudiantes del momento, del que Jaqui formó parte.
Gran entusiasta de los concursos, reconoce a esta modalidad como la que les posibilitó a él, junto con su socio José Antonio Urgel, acceder a trabajos de gran envergadura. En la década del setenta se adjudican los primeros premios en Concursos Nacionales de Anteproyectos: San Vicente De Paul (Orán, Salta, 1970), Mercado Central (Buenos Aires, 1971), Museo y Archivo Histórico del Banco Provincia (Buenos Aires, 1980). Asociados con el Estudio Antonini, Schon, Zemborain, se adjudicaron los concursos: Centro Administrativo Gubernamental (La Plata, Buenos Aires, 1971), Universidad Nacional de San Luis (San Luis, 1977), segundo premio en el Centro Cívico San Juan (San Juan, 1971).
El gran ejercicio de síntesis y la búsqueda de ideas claras, común denominador de un modo de hacer arquitectura de toda una generación, lo adjudica al esfuerzo y la tenacidad con que había que enfrentarse para lograr el éxito en los concursos.
El Hospital en Orán, trabajo paradigmático en su obra, pensado desde lo racional, es una búsqueda que reúne respuestas acordes a un clima tropical y dentro de una zona sísmica. Esas tremendas exigencias fueron resueltas con elementos premoldeados y un alto sobretecho liviano.
La valoración de las sombras, el verde y el ritmo de una estructura modulada muestra a un arquitecto atento a los requerimientos funcionales así como a una plástica materialización de la obra.
En esta muestra Llauró decidió exhibir los ejemplos que, dentro de su vasta obra, reflejaran con mayor fidelidad su pensamiento y su modo de hacer arquitectura. (Matías Gigli_Página 12)
Jaqui ha dedicado gran parte de su tiempo a la docencia y en su cátedra se reúnen hoy tres generaciones de arquitectos.
¿Cómo eran los años de facultad en la calle Perú? ¿Quiénes eran los referentes para los alumnos en esa época? Rápidamente, Jaqui trae a la memoria las dos cátedras que por aquel entonces habían incorporado las ideas del movimiento moderno, las de Casares y Leiva. Era con esos profesores con quienes todos querían cursar. Fuera de la facultad, las figuras de Amancio Willams, “dueño de un purismo y de ideas arquetípicas” y de Eduardo Sacriste, “un ejemplo de sensatez y capaz de lograr una lógica amalgama entre lo utópico y lo fáctico”, eran estudiados y valorados.
El recuerdo de los años de formación lo llevan a invocar el nombre de Pierre de Monteró, un foro de discusión de ideas y un punto de encuentro para el trabajo en común que congregó a un grupo de estudiantes del momento, del que Jaqui formó parte.
Gran entusiasta de los concursos, reconoce a esta modalidad como la que les posibilitó a él, junto con su socio José Antonio Urgel, acceder a trabajos de gran envergadura. En la década del setenta se adjudican los primeros premios en Concursos Nacionales de Anteproyectos: San Vicente De Paul (Orán, Salta, 1970), Mercado Central (Buenos Aires, 1971), Museo y Archivo Histórico del Banco Provincia (Buenos Aires, 1980). Asociados con el Estudio Antonini, Schon, Zemborain, se adjudicaron los concursos: Centro Administrativo Gubernamental (La Plata, Buenos Aires, 1971), Universidad Nacional de San Luis (San Luis, 1977), segundo premio en el Centro Cívico San Juan (San Juan, 1971).
El gran ejercicio de síntesis y la búsqueda de ideas claras, común denominador de un modo de hacer arquitectura de toda una generación, lo adjudica al esfuerzo y la tenacidad con que había que enfrentarse para lograr el éxito en los concursos.
El Hospital en Orán, trabajo paradigmático en su obra, pensado desde lo racional, es una búsqueda que reúne respuestas acordes a un clima tropical y dentro de una zona sísmica. Esas tremendas exigencias fueron resueltas con elementos premoldeados y un alto sobretecho liviano.
La valoración de las sombras, el verde y el ritmo de una estructura modulada muestra a un arquitecto atento a los requerimientos funcionales así como a una plástica materialización de la obra.
En esta muestra Llauró decidió exhibir los ejemplos que, dentro de su vasta obra, reflejaran con mayor fidelidad su pensamiento y su modo de hacer arquitectura. (Matías Gigli_Página 12)
No es un dato menor que suma a la especialidad de la espacialidad construida que el arquitecto Juan Manuel Llauro y equipo hayan participado en idear a detalle el Templo Sagrado Corazón de Jesús de Choele Choel .
No hay comentarios:
Publicar un comentario